Un formato y trabajo imposibles de ver en otros sitios de comidas y que consiguen que el comensal que acude al Sublimotion perciba sabores y sensaciones únicas. Juan Pedro Chuet-Missé es redactor de Cerodosbé/Tendencias desde 2017, y del Grupo Economía Digital desde 2015. Especialista en destinos fuera de lo normal, cultura, estilo de vida, viajes y todas y cada una aquellas historias que merece la pena contar. No podía faltar un local del Lejano Oriente en este listado. Y por supuesto que debía ser en Shanghái, la localidad china que ha crecido tan deprisa y tiene una población de nuevos ricos tan enorme que hay toda clase de tiendas de lujos y sitios de comidas ultra exclusivos para contentarlos.
Actualmente, en todas y cada una de las áreas, pareciera que lo que hay que hacer es ofrecer no un servicio sino más bien una experiencia lo más de inmersión viable. Me agradan los sitios lindos pero estoy lejos de tener mucho dinero, así que me debo constituir con observarlos en la tele o en gacetas. Siempre digo que si tuviera mucho dinero me lo gastaría en ir a esos restaurantes y hoteles para millonarios, no por el servicio sino más bien por los lugares, experiencias y sabores que brindan. El valor por persona incluye dos horas y media de experiencia, en las que se prueban veinte platos en una salón que cambia de temperatura según el plato que se esté degustando en ese momento.
Vida Y Estilo
Y la razón de este cambio es que es este último se ajusta a la tradición de dejar al chef que escoja por uno los platos. Esto es, es tener al cocinero predisposición del comensal. En estos restaurantes uno no va comer o cenar, sino a tener una experiencia entre sabores, aromas y un despliegue visual sin igual. O cuando menos de este modo lo promocionan los impulsores de estos restaurantes que dan menús desde los 500 a alén de los 1.500 euros. Sublimotion nació entre las paredes del Taller de investigación del chef Paco Roncero y en 2014 abrió sus puertas por vez primera en el Hard Rock Hotel de Ibiza.
Tan sólo para quienes tengan el poder de compra de gastarse mínimo 600 euros en una noche solo para salir a cenar. Varios de ellos tampoco aparecen en las listas o ránquines de los mejores sitios de comidas de todo el mundo. Entonces, hay comida, hay diseñadores, hay ilusionistas, hay especialistas, escenógrafos, músicos, guionistas y considerablemente más.
Sublimotion, Ibiza, España
El precio por una comida, y eso que hay una larga lista de reserva, es de 2.000 euros. Fotografía Restaurante SublimotionEl juego visual sigue en la mesa entre los platos y la vajilla, mientras un pequeño ejército de camareros cambia de indumentaria acorde se rota de temática. L’Arpège centra las mayoría de sus platos en las verduras que se recogen en el huerto del lugar de comidas, que más allá de que se sitúa muy cerca del río Sena en el distrito 7 de París, cuenta con cinco acres de lote para cultivar. Sublimotion es un espectáculo multisensorial, diferente a todo cuanto el comensal haya vivido antes. En definitiva, es una experiencia que solo se entiende al vivirla en primera persona.
El restaurante Masa, de Novedosa York, propone un paseo por la cocina japonesa clásico a través de un menú a precio fijo apoyado en el sushi. Foto Nurs-EtEntre las excentricidades está el chuletón tomahawk revestido con oro de 24 kilates. Este plato solo cuesta 1.715 euros, pero si hay pocos ánimos de abonar esta pequeña fortuna, se puede soliciar la hamburguesa especial por 118,3 euros.
La Sofisticación De Shanghái
Algunos de ellos, en dependencia de su localización, se enfrentan a cierres temporales de múltiples semanas, por restricciones de la hostelería en su ciudad. Te presentamos los primeros en función de los menús de mayor coste que incluyen en sus cartas. La experiencia gastronómica, con un menú degustación de entre 20 y 25 platos, se acompaña con sonidos y visuales. La iniciativa es conjuntar las emociones producidas por los fragancias, texturas y sabores de la comida con este género de elementos para hacer una exclusiva experiencia donde concurran todos los sentidos. Asimismo, pero los productos en venta son platos, y los sabores, nada que hayas probado en tu vida. Sí, pero en esta la música y el baile acompañan, y, extraño, aparece de nuevo el whisky pero con otro gusto, ahumado, que se repite en la salsa barbacoa.
Los costos de estos seleccionados van desde 295 hasta euros. Falta también en la lista de chefs, un ilustre, Joel Robuchon, el cocinero con más estrellas Michelín del mundo, que murió en el mes de agosto de 2018 juntando un total de 32 distinciones de esta clase. Entre los muchos sitios de comidas de su propiedad, entre los que podrían entrar en este top, el situado en el hotel-casino MGM Grand Las Vegas, permanece cerrado, sin que se conozca la fecha de reapertura. El Sublimotion de Ibiza, del chef Paco Roncero, cerró sus puertas con el inicio de la pandemia y anunció que volvería este año, de manera previsible cuando se inaugure la temporada de verano.
El Instante De Los Sitios De Comidas Digitales
Su cocina, afrancesada pero innovadora, se basa en los elementos locales que ellos mismos recogen de su huerta. Y en el momento en que piensas que estas en el siglo XXI es posible que de golpe aparezcas en un tren muy elegante y el plato en tu mesa sea completamente otro. El paladar y la vista no cesan de experimentar maravillas.
En Las Vegas, ese gran destino en el que reina el dinero y al que cada vez más chefs del mundo se están mudando para abrir allí sus restaurantes de alta cocina , se encuentra el quinto mucho más caro de todo el mundo. Pero en ocasiones, alén de la experiencia gastronómica, son otros los componentes los que hacen que el valor de la cuenta ascienda astronómicamente en ellos por encima del de muchos otros locales. A continuación, los once sitios de comidas mucho más costosos del mundo. Sus chefs son conocidos, su cocina es de alta calidad y tienen el denominador común de ser los restaurantes con los menús más caros del mundo. Foto lugar de comidas MasaEl precio inicial de los menús es de 564 euros, pero si se pide el omasake para 2 sube a 1.510 euros.